No me llames amor,
Si vas a llamar a la luna sólo cuando esté llena;
No me llames amor
Si vas a tomar un vino tinto
Y me vas a culpar por tu pérdida de juicio,
Que lo nublan los recuerdos aferrados,
En un cuadro donde la actuación pinto,
No me llames amor,
Si no te gusta mi personaje,
Si no quieres que te acaricie
Cómo en aquella calle solitaria,
Actuando como especie parasitaria
Para vivir del cuento,
Vivir contento
En la serotonina del momento,
De la que somos adictos,
Porque no podemos culparnos
De aquel vicio llamado contacto epidérmico,
No me llames amor,
Porque no soy para ti nada menos de lo que soy para ti:
Una febrilidad con brote epidémico.
Cristela Moreno García.
palabra cierta 